El dispositivo “AFILADOR” (Figura 1) consiste en una maquina diseñada para formar bisel, afilar y asentar hojas de herramientas de corte aceradas, realizando un proceso inverso al tradicional método de deslizar la hoja sobre una piedra ya que, por el contrario, en este proceso la hoja permanece inmóvil en la máquina y por sobre la misma se desliza una piedra abrasiva anclada en un punto de apoyo regulable, lo que permite mantener un ángulo uniforme de rozamiento en toda la extensión de la hoja.
La pieza a trabajar se sujeta firmemente a la base del “AFILADOR” (Figura 1) mediante sujeción magnética de gran potencia, esto garantiza que el trabajo se realice de forma segura, pudiendo regular la superficie de apoyo en distintas posiciones dependiendo de las dimensiones de la hoja.
A la hora de realizar el desgaste, el sistema de anclaje (Figura 3) que sustenta el brazo porta-piedra (Figura 2) permite todo tipo de movimientos, (ya sean circulares, pendulares, laterales, transversales, etc.) manteniendo un ángulo constante entre el plano de ataque de la piedra (Figura 2.B) y el plano de apoyo de la hoja, asegurando así un ángulo de barrido uniforme sin importar las dimensiones que esta última posea.
El sistema porta-piedra (Figura 2) es un brazo compuesto por una grampa de sujeción (Figura 2.C) y una varilla roscada (Figura 2.A) en un extremo que, al ser atornillada, ejerce presión sobre la piedra (Figura 2.B), manteniendo la misma unida y a su vez alineada al brazo.
La grampa de sujeción (Figura 2.C) posee medidas para alojar una piedra de afilar (Figura 2.B) manual Estándar (Reemplazable) sujeta por los lados, dejando ambas caras principales descubiertas, las cuales presentan 2 granulometrías distintas lo que permite cambiar fácilmente de grano grueso a fino y viceversa girando el brazo completo 180º sin realizar ningún tipo de modificación en la máquina.
En el extremo opuesto, un apéndice de varilla roscada permite adosar a la grampa de sujeción (Figura 2.C) una perilla (Figura 2.D) junto con una arandela de protección (Figura 2.E) para empuñar con seguridad el brazo porta-piedra (Figura 2), separando la mano del operario del filo de la pieza mientras trabaja.
Un sistema de apoyo guía (Figura 3) mantiene anclado, a una altura fija regulable, el eje del brazo porta-piedra (Figura 2), permitiéndole pivotear en el espacio y a su vez deslizarse en profundidad, lo que ofrece una completa libertad de movimiento manteniendo siempre un ángulo constante en el plano de ataque de la piedra. Este punto de apoyo consta de una fijación regulable en altura (Figura 3.A) por el que corre, libre, el eje del brazo porta-piedra (Figura 2). Dicha fijación cuenta con distintas posiciones de regulación en altura (Figura 3.B) y ésta altura es la que determina el ángulo de bisel y filo en el que incide la piedra sobre la hoja a trabajar.
El sistema magnético de sujeción de la pieza (Figura 4) admite una regulación de varios puntos (Figura 4.A) mediante un herraje (Figura 4.B) que actúa como tope cumpliendo una doble función; mantener alineado el lomo de la hoja a la vez que permite establecer con exactitud la distancia correcta de la superficie a trabajar respecto del borde del soporte.
El brazo porta-piedra (Figura 2) posee una posición de descanso para los momentos en que no se utilice la máquina, evitando así, que la piedra abrasiva repose o golpee sobre el soporte magnético (Figura 4). Para utilizarlo; basta con anclar el eje del brazo a un gancho sostén (Figura 5.A) ubicado en la parte posterior del chasis (Figura 6.A). La posición elevada en la que reposa suspendida la piedra abrasiva (Figura 2.B) cuando el brazo está anclado, ofrece un generoso espacio para intercambiar con facilidad las distintas herramientas de corte o dar vuelta las hojas mientras se trabaja.
“AFILADOR” (Figura 1) está diseñado para poder utilizarse en cualquier superficie plana si necesidad de ser amurado a una mesa de trabajo, dando la flexibilidad de poder transportarse, almacenarse, o reubicarse cuando sea conveniente. El chasis (Figura 6.A) que compone el cuerpo principal (Figura 6) brinda una base sólida y estable a la máquina, este está específicamente dimensionado para mantenerse firme a la superficie en la que apoya mientras se trabaja. La base del chasis (Figura 6.B) tiene adosadas, en los pliegues paralelos que funcionan como punto de contacto con la mesa de trabajo, dos bandas antideslizantes (Figura 6.C). Estas bandas sumadas al peso de la maquina evitan cualquier movimiento no deseado sin importar de que material sea la superficie en la que apoye.